De un tiempo acá, he tomado más conciencia de los hábitos de consumo y sus repercusiones en el medio ambiente, y entiendo como calidad de vida el contar con aire limpio, con agua potable, entre otros factores que nos permiten disfrutar de diferentes maneras nuestro planeta. Para contribuir a vivir en un entorno amigable con el medio ambiente y con nosotros mismos, hay algunos hábitos sencillos que realmente hacen la diferencia y no solo benefician el planeta, sino que pueden mejorar nuestra calidad de vida.
Yo por mi lado me sumo a los emprendimientos y empresas que ponen su granito de arena para minimizar el impacto ambiental. A diferencia de los plásticos, el papel proviene de la madera, un material 100% orgánico que se descompone y es asimilado sin afectar negativamente al medio ambiente. Por eso, decidà que mi packaging sea ecológico y germinable. Un empaque que no deban arrojar a la basura, sino que le den un chance a ser reutilizado posteriormente.
Cada vez que mis clientes reciben mis productos tienen la oportunidad de cultivar y reutilizar mis empaques; mis tarjetas y hang tags están hechos en papel reciclado, reciclable y con semillas de aguaymanto incorporadas. También las bolsas y papeles que utilizo en los envÃos son biodegradables y reciclables. Estoy muy feliz de dar este paso y considero que todos, de alguna u otra forma, podemos cooperar con el cuidado de la Tierra.